Florencia es el escenario elegido para el comienzo del 111º Tour de Francia en lo que constituirá el primer Grand Départ de la historia desde Italia, once años después de los Campeonatos del Mundo toscanos cuyos tres arcoíris masculinos estarán presentes en esta gran ronda gala.
La relación de Italia con el Tour de Francia consta de un sinfín de capítulos memorables: desde el excelso triunfo de Ottavio Bottecchia en 1924, portando el maillot amarillo desde la primera a la última etapa, hasta el vuelo del ‘Diablo’ Chiappucci en Sestrières, pasando por el éxito de Fausto Coppi en Alpe d’Huez.
El campeón nacional italiano Alberto Bettiol estrenará el maillot ‘tricolore’ este sábado en su Toscana natal, siendo una de las estrellas de un pelotón donde brilla con luz propia el belga Remco Evenepoel.
Antes de entrar en acción, los ciclistas disfrutarán este jueves de un bello paseo por entre los principales monumentos de Florencia para acudir a la presentación oficial que se celebrará en el Piazzale Michelangelo, desde donde gozarán de una vista privilegiada de la ciudad de los Medici.
Entre Sciardis y Boasson Hagen: las doce metas del Tour de Francia en Italia
Con cuatro salidas y tres llegadas para un total de 684,8 kilómetros recorridos en competición (más los 21,8 que la primera etapa discurrirá por el microestado de San Marino), este será el Tour de Francia que más tiempo pasará en suelo italiano de toda la historia. La primera vez que Italia acogió una meta de la gran ronda francesa fue en su 35ª edición, celebrada en 1948, con un celebrado triunfo en San Remo de Gino Sciardis escapado en solitario. Curiosamente, Sciardis ganaría otra etapa más en el Tour, en 1950… pero lo haría bajo la bandera francesa, después de naturalizarse toda vez que había con 13 años su familia había abandonado Italia para instalarse en Bondy, a las afueras de París, donde Gino vivió hasta su muerte.
De las otras once veces que el Tour ha visitado Italia, seis se saldaron con triunfo transalpino. Dos fueron para Fausto Coppi: una en Aosta, en 1949, arrebatando el maillot amarillo a Gino Bartali en uno de los capítulos más memorables de su icónica rivalidad; otra en Sestrières, en 1952, al día siguiente de conquistar el Alpe d’Huez y con ello proclamarse vencedor del primer final en alto de la historia de la Grande Boucle. También en Sestrières triunfó Claudio Chiappucci en 1992, con una épica ofensiva de más de 200 kilómetros mientras Miguel Indurain conseguía ponerse líder de la general llegando desde atrás. Dos etapas del Tour de Francia han terminado en Italia en el presente siglo, ambas con victoria de la escapada: una en 2008, con meta en Prato Nevoso y triunfo de Simon Gerrans; y otra en 2011, con final en Pinerolo y Edvald Boasson Hagen alzando los brazos. Cuatro ciclistas de aquel pelotón de hace trece años se pondrán un dorsal en el presente Tour de Francia: Jakob Fuglsang (entonces en Leopard-Trek; hoy en Israel-Premier Tech); Geraint Thomas (Team Sky; Ineos Grenadiers); Mark Cavendish (HTC-High Road; Astana Qazaqstan); y Rui Costa (Movistar Team; EF Education-EasyPost).
Remco Evenepoel: “No voy a caer en supersticiones”
Llega la hora del bautismo de fuego para Remco Evenepoel, quien descubre esta semana el Tour de Francia a los 24 años y después de haber anotado en su palmarés La Vuelta 22 y los títulos de campeón del mundo tanto de línea como de contrarreloj. Su hoja de servicio le convierte en un serio candidato al podio final, que este año se escenificará en la Plaza Massena de Niza… el 21 de julio, día de la fiesta nacional belga. “Es mi primera vez en el Tour, así que serán unas semanas de descubrimiento”, aseveró en rueda de prensa. “Espero estar en buena forma ya los primeros días; no necesariamente para conseguir una victoria de etapa, sino para luchar por la general”.
El líder de Soudal-Quick Step guarda recuerdos de todo tipo en Italia, el país que acoge este Grand Départ. En el Giro de Lombardía de 2020 estuvo a punto de marrar su carrera deportiva o incluso perder la vida a causa de una durísima caída; pero también ganó dos contrarrelojes en el Giro 2023 (una de ellas a un puñado de kilómetros de Rimini, meta de la primera etapa de este Tour), en el cual hubo de abandonar siendo ‘maglia rosa’ a causa del Covid. “Ha habido altibajos en mi relación con Italia”, concede Remco. “No obstante, no voy a caer en supersticiones ni a llevar el pasado en mi cabeza en este inicio de Tour de Francia”.
Los ocho de casa: un maillot de puntos rojos… y un ‘tricolore’
Pocos ciclistas disfrutarán tanto de este Grand Départ como Alberto Bettiol. El ciclista de EF Education-EasyPost es el único de 176 participantes de este Tour de Francia natural de Toscana: concretamente de Castelfiorentino, a unos 40 kilómetros de Florencia. Para más inri, el ganador del Tour de Flandes de 2019 se proclamó campeón nacional italiano el pasado domingo… en Sesto Fiorentino, otro municipio de los alrededores de la capital de los Medici donde Bettiol estrenará su maillot ‘tricolore’.
Otro tipo de lujo gozará el debutante Matteo Sobrero (Red Bull-BORA-Hansgrohe): la tercera etapa atravesará su municipio natal (Alba) en el kilómetro 165,4 de su recorrido. Un segundo italiano conocerá el Tour este año: el veloz Michele Gazzoli, quien estará acompañado en Astana Qazaqstan por el experto Davide Ballerini. Quien sí conoce de sobra esta prueba es Giulio Ciccone, portador del maillot amarillo dos días en 2019, ganador de la Montaña en 2023 y líder de Lidl-Trek en esta edición. Completan la nómina de ocho participantes transalpinos, uno más que el año pasado, el potente Luca Mozzato (Arkéa-B&B Hotels), el escalador Davide Formolo (Movistar Team) y el rodador Gianni Moscon (Soudal-Quick Step). Su reto compartido será anotar una victoria de etapa para Italia cinco años después de la última que marcara Vincenzo Nibali en Val Thorens, penúltima meta del Tour de Francia 2019.
Ottavio Bottecchia, el pionero
La historia del Tour de Francia arranca en 1903 con la victoria de un diminuto deshollinador de origen italiano… si bien Maurice Garin, nacido en el Valle de Aosta, ya tenía la nacionalidad francesa cuando inauguró el palmarés de la Grande Boucle. Así, el verdadero pionero en lo que a victorias italianas en el Grande Boucle se refiere fue Ottavio Bottecchia, que dejó una huella indeleble en la ronda gala con sólo cuatro participaciones. Ya se anotó la segunda etapa de la edición de su debut (1923), en la cual vistió el maillot amarillo seis días y alcanzó París en segunda posición de la general, sólo superado por Henri Pélissier. Al año siguiente no hizo prisioneros: ya en la primera etapa alzó los brazos y se vistió de amarillo, manteniendo la primera posición de la general desde el primer hasta el último día para rubricar un logro que sólo han podido emular Nicolas Frantz (1928) y Romain Maes (1935).
El ‘Muratore del Friuli’ (“Albañil de Friuli”) incluso culminó su festival con una victoria en el antiguo velódromo parisino del Parque de los Príncipes. En 1925, Bottecchia repitió triunfo absoluto con 55 minutos de ventaja sobre el segundo, el belga Lucien Buysse, y sumó otros cuatro parciales. Su siguiente Tour, en cambio, lo terminó antes de tiempo al abandonar en la décima etapa… y a la postre, fue el último: en junio de 1927, Bottecchia fallecería en extrañas circunstancias cuando un granjero creyó pillarle robando uvas de su huerto y le asestó una pedrada mortal. No obstante, dejó abierta la histórica línea de vencedores italianos del Tour que después prolongarían Gino Bartali (1938, 1948), Fausto Coppi (1949, 1952), Gastone Nencini (1960), Felice Gimondi (1965), Marco Pantani (1998) y Vincenzo Nibali (2014).
Tres arcoíris florentinos en el pelotón del Tour
La Toscana es tierra de ciclismo, y prueba de ello son los numerosos campeones que han nacido aquí: entre ellos, dos ganadores del Tour de Francia como el ‘Leone’ Gastone Nencini (natural de Mugello, a las afueras de Florencia) y el ‘Piadoso’ Gino Bartali (nacido en la pedanía florentina de Ponte a Ema). En estas carreteras se disputó en 1870 la Firenze-Pistoia, la primera carrera ciclista jamás acaecida en Italia que fue convertida posteriormente en una contrarreloj individual celebrada cada mes de octubre. En la actualidad se corren la Premondiale, una vuelta femenina, y el Giro della Toscana, una semiclásica cuyo último ganador, Pavel Sivakov, disputará en este Tour de Francia al servicio de Tadej Pogačar con UAE Team Emirates.
La última cita ciclista de primer nivel acogida por Florencia fueron los Campeonatos del Mundo de 2013. Los tres ganadores de las pruebas en línea masculinas estarán este sábado 29 de junio en el Grand Départ. Fueron Mathieu Van der Poel, que se impuso en la carrera juvenil por delante de Mads Pedersen; Matej Mohoric, que se proclamó campeón sub23 superando a Louis Meintjes; y Rui Costa, arcoíris en la prueba absoluta. “Fue un día perfecto”, recuerda el recién proclamado campeón nacional portugués. “Desde niño había soñado con ser campeón del mundo, y sin embargo aquella mañana no se me pasaba por la cabeza la posibilidad de conseguirlo. No obstante, todas las circunstancias se pusieron a mi favor y las piernas me respondieron”. Estos días, el ganador de tres etapas en el Tour de Francia podrá revivir una de las jornadas más memorables de su vida deportiva.
Bettiol y Mozzato, los ídolos de los niños: “Todos podéis ser ciclistas”
Un centenar de niños se dieron cita en la Sala Eddy Merckx del Teatro del Maggio Musicale, cuartel general del Tour de Francia en este Grand Départ de Florencia, para la conferencia de prensa de los niños en la que pudieron formular todas las preguntas que quisieron durante casi una hora a dos participantes de la Grande Boucle como Alberto Bettiol (EF Education-EasyPost) y Luca Mozzato (Arkéa-B&B Hotels), así como al exciclista y comentarista televisivo Davide Cassani. Había tantos chicos como chicas en el auditorio, y la primera pregunta no se ha hecho esperar: “¿Podemos las mujeres correr el Tour de Francia?” Ha sido Cassani el encargado de explicar al ilusionado auditorio que sí, que desde 2022 existe el Tour de France Femmes avec Zwift y que este año se celebrará en agosto.
Los zagales han hecho preguntas de táctica (“¿qué pasa si se cae el líder del equipo?”), de nutrición (“¿cuántos bidones os bebéis en cada etapa?”), e incluso de reglamento (“¿hay algún movimiento que esté prohibido sobre la bici?”). Mozzato ha reconocido que, de toda la comida que tiene vedada por su oficio de ciclista, la que más echa de menos es el tiramisú. Bettiol, por su parte, ha contado que perdió una etapa del Giro de Italia por comprobar la distancia que quedaba para meta en el GPS de su bici en lugar de fiarse de los paneles del recorrido. “Ese día aprendí que, en lugar de tanto mirar la pantalla, ¡debo mirar la carretera!” Una de las últimas preguntas ha sido de una niña que se sentía muy bajita con respecto a las demás: “¿Crees que ser pequeña me impedirá llegar a ser ciclista profesional?” A lo que Mozzato ha respondido explicándole que él mismo es relativamente bajo respecto a otros corredores; “así que no os preocupéis por lo que medís, porque todos podéis ser ciclistas”. ¿Será esta chica la próxima Gaia Realini?
Santini juega en casa
Desde 2022, la confección de todos los maillots distintivos del Tour de Francia, así como las colecciones especiales en torno a distintos hitos y etapas, ha corrido a cargo de Santini. La firma bergamasca ha aprovechado este primer Grand Départ desde Italia para diseñar tres maillots correspondientes a las tres ciudades transalpinas visitadas por las etapas iniciales de esta edición. La prenda ‘Firenze’, por ejemplo, presenta motivos del Renacimiento y la flor de lis de la ciudad. Por otra parte, ‘Bologna’ toma los colores rojo y azul del equipo de fútbol de la ciudad, siete veces campeón de Italia, y lo suma con el tridente de la fuente de Neptuno y un guiño a las ‘tagliatelle a la boloñesa’. Por último, pero no menos importante, ‘Torino’ evoca la grandeza histórica de la primera capital del reino de Italia, representado por la Mole Antonelliana, emblema de la ciudad a la misma altura que su animal, el toro, presente en la espalda del maillot. Santini ha concebido asimismo varios maillots más inspirados en el trazado de este Tour de Francia 2024, incluyendo por supuesto uno sobre Niza con sombrillas y soles en su diseño.
Puedes encontrar las colecciones completas de Santini para el Tour de Francia y el Tour de France Femmes avec Zwift aquí: Santini Cycling Wear