“Era una buena escapada, pero el pelotón no nos ha concedido suficiente renta como para jugarnos la victoria en el puerto final. Hemos luchado con todo lo que teníamos, pero sabíamos que era dificilísimo que nuestra fuga tuviera éxito. Cuando Tadej y Jonas han llegado a nuestra altura, he tratado de seguirles tanto tiempo como he podido… pero tenían otro ritmo”
“Antes del Tour estuve enfermo y eso me ha hecho llegar un poco peor de forma de lo que esperaba. Aun así, conseguí vestirme con el maillot amarillo un día. Ahora estoy haciendo otra carrera. Quedan muchas oportunidades en la montaña, y estoy muy contento porque noto que mis piernas son cada vez mejores”