“Ganar una etapa del Tour de Francia era un gran objetivo para el equipo Dimension Data. Conseguir además el maillot amarillo es un regalo para nuestros sponsors y para la fundación Qhubeka. Lo he hecho por el equipo, para la campaña benéfica con la que pretendemos que 5.000 niños puedan tener una bicicleta. Corremos por una causa. No importa quién esté o deje de estar, el Tour de Francia es el Tour de Francia y ganar una etapa aquí es increíble, muy emocionante. El de mañana va ser un día especial porque voy a correr con el maillot amarillo. Es el mayor icono en el mundo del ciclismo y no se me ocurre mejor lugar que Utah Beach para conseguir esta victoria, el lugar en el que miles de soldados murieron luchando por liberar el mundo occidental”.
“Cuando era más joven se me pasó por la cabeza enrolarme en el ejército británico. He disfrutado mucho con la ceremonia organizada después del podio, con la que hemos rendido homenaje a los caídos en la guerra. Es mi manera de dar las gracias a todos mis amigos en el Ejército”.
“Cada victoria en el Tour de Francia te cambia la vida. Mis 27 victorias son todas diferentes y las recuerdo todas perfectamente: las ciudades, los equipos para los que competía, las circunstancias… Hoy pensé que iríamos con viento de cola y que el final sería muy rápido pero cambió todo un poco en los dos últimos kilómetros, así que esperé. Quería tener mi espacio y por suerte Sagan abrió hueco a la derecha. Pude coger la máxima velocidad para llegar hasta la meta sin que nadie me adelantara”.
