"El objetivo del día era deshacerme de la frustración de no haber atacado ayer por la victoria. En realidad, ayer yo no estaba listo. Hoy intentamos conservar el control de la carrera. Al pie del Cormet de Roselend, sentí que era el momento de atacar. Yo mismo estaba sorprendido de ver la diferencia que lograba crear en la subida de Hauteville, porque no es una ascención fácil para una subida en solitario. Había viento y no era particularmente elevada. Tengo un equipo fuerte y hemos probado en los dos últimos años que todo es posible, incluso defender las dos camisetas. Los Pireneos serán aún más difíciles que los Alpes, así que todo es prosible. Además tengo que luchar por los 110 kms de contrareloj individual, lo cual no es exactamente mi especialidad. Por eso, yo prefiero ser realista en cuanto a lo que se refiere a la camiseta amarilla. En cuanto a la camiseta de pepas, es lo que más me interesa y pienso que puedo defenderla."
Entrevistas
15 julio 2007
- 19:15
Michaël Rasmussen: "Todo es posible"