TEAM VISMA | LEASE A BIKE

Tras contar durante muchos años con el patrocinio de Rabobank, el equipo fue retomado durante un tiempo por la lotería nacional (LottoNL), convirtiéndose en el equipo nacional de los Países Bajos y formando a jóvenes talentos. A continuación, se convirtió en una superpotencia internacional bajo el nombre de Jumbo-Visma.

En 1996, siguiendo la estela de los patrocinadores precedentes de los grupos deportivos formados por Jan Raas, Kwantum-Hallen (desde 1984, penúltima temporada como corredor del pentacampeón de la Amstel Gold Race), Superconfex (a partir de 1987), Buckler (1990), WordPerfect (1993) y Novell (1995), el banco naranja, color que delata sus orígenes holandeses, firmó un contrato a largo plazo con el Tour de Francia pero la entidad terminó tirando la toalla a finales de 2012.

Belkin, fabricante de origen estadounidense especializado en conexiones y redes de Internet, garantizó el relevo y la historia perdura en un país que siente auténtica pasión por el ciclismo y siempre se ha mostrado fiel al Tour de Francia. El equipo se centró, por vocación, en cazar etapas con corredores de clásicas, principalmente holandeses, para luego mostrarse más ambicioso con la contribución de sus sprinters, sus escaladores y sus cazaetapas extranjeros, como Robbie McEwen, Óscar Freire, Michael Rasmussen, Denis Menchov, Juan Manuel Gárate y Luis León Sánchez, con mayor o menor fortuna, antes de volver a poner el foco en la eclosión de jóvenes promesas holandesas de muy gran calibre.

El equipo no consiguió desatar todo el potencial de Bauke Mollema, Moreno Hofland ni Wilco Kelderman, que partieron hacia otros horizontes, al igual que Lars Boom, que logró al menos la victoria en la etapa de los adoquines de Arenberg en 2014. Robert Gesink, 6º en la general en 2015, inmediatamente detrás de los "Cuatro Fantásticos" (Froome, Quintana, Nibali, Contador), entre los que se intercaló Valverde, no ha cumplido todos sus sueños en el Tour de Francia. Steven Kruijswijk, que rozó la victoria en el Giro 2016, y Primoz Roglic se convirtieron en sus grandes protagonistas, 5º y 4º en la clasificación final en 2018, antes de que Kruijswijk lograra subir al podio, concretamente al tercer escalón en 2019.

Hace seis años, el holandés le puso las cosas difíciles al Team Sky de camino al Alpe d'Huez al escaparse en solitario en la ascensión al puerto de Croix de Fer. Roglic, primer esloveno ganador de una etapa, después de coronar el Galibier en solitario a la cabeza en 2017, se adjudicó una nueva victoria en 2018 al atacar en el Aubisque antes de demostrar, en 2019, en el Giro (3º) y en la Vuelta (ganador) que tenía lo que hay que tener para hacerse con el maillot amarillo, que lució su compañero de equipo Mike Teunissen durante dos días en 2019.

El fichaje de Tom Dumoulin, segundo en el Tour 2018, no ha aportado los resultados esperados y Jumbo-Visma ha decidido centrar el tiro, casi de forma exclusiva, en la clasificación general, dejando desde entonces sin opciones a uno de los mejores sprinters del mundo, Dylan Groenewegen, ganador en los Campos Elíseos en 2017, luego en Chartres y en Amiens, al pie de la catedral, en 2018 y posteriormente en Chalon-sur-Saône en 2019.

Con Wout van Aert como impresionante as en la manga, no estuvo lejos de alcanzar su sueño de ganar el Tour de Francia en 2020, pero su líder Primoz Roglic, que dominó durante casi tres semanas, falló en la contrarreloj la víspera de la meta, quedando relegado por su joven compatriota Tadej Pogacar. Sin embargo, el esloveno volvió a levantar cabeza haciéndose con una segunda Vuelta consecutiva y después una tercera tras la dura decepción del Tour 2021, víctima de una impresionante montonera en la tercera etapa Lorient > Pontivy.

Aunque en esa ocasión Jumbo-Visma no podría acercarse al maillot amarillo, acaparado muy pronto por Tadej Pogacar, no se iría tampoco con las manos vacías del Tour 2021: fue segundo en la general final gracias al danés Jonas Vingegaard, que figuraba inicialmente tan solo como sustituto de Tom Dumoulin, cuando este decidió realizar por primera vez una pausa en su carrera profesional, así como cuatro victorias de etapa gracias a Wout van Aert en modo "triatleta" (en la montaña con la doble ascensión del Ventoux, en la contrarreloj de Libourne y en el sprint en los Campos Elíseos).

Pese al abandono (de nuevo) de Roglic por una caída, Jumbo-Visma arrasó en 2022: victoria final de Jonas Vingegaard, que se impuso frente a Tadej Pogacar en el puerto del Granon gracias al trabajo ingente de su equipo en el Galibier, maillot verde para Wout van Aert, con tres victorias de etapa, así como la única victoria de etapa francesa para el país anfitrión, en Cahors, al final del Tour, de la mano de Christophe Laporte.

Vingegaard dio un golpe de autoridad en el Tour de Francia de 2023 al hacerse con el maillot amarillo desde la sexta etapa. Sacaba apenas nueve segundos tras el Grand Colombier transcurridos dos tercios del Tour, pero hizo mella en su rival Tadej Pogacar en treintaicinco kilómetros de competición (22 + 13, repartidos en dos etapas además de la crono de Passy-Combloux y el puerto de la Loze) tras sacarle siete minutos y medio de ventaja. Su compañero de equipo Sepp Kuss era aún sexto en la general la víspera de la contrarreloj de Combloux antes de terminar duodécimo… y de ganar la Vuelta en un triplete único en la historia del ciclismo porque el podio del tercer Gran Tour del año 2023 acogía también a los ganadores de las dos primeras grandes vueltas (Primoz Roglic y Jonas Vingegaard), los tres pertenecientes al mismo equipo.

Al Jumbo-Visma solo le faltó una victoria de etapa en el Tour de Francia 2023. El belga Wout van Aert, 2º en St-Sébastien y St-Gervais y 3º en Limoges y Combloux, no peleó el maillot verde que lució en la edición anterior para rodar al servicio del maillot amarillo.